A 10 años de …


Cada 30 de mayo no es uno más en la historia de Entre Ríos, y este domingo se cumplen diez años de la participación de la Unión Entrerriana de Rugby (UER) en el Seven de Roma, que significó la primera intervención fuera del país de un equipo de la entidad.

El conjunto de juego reducido de la UER partió hacia el territorio italiano para ser parte de un campeonato internacional de un nivel superlativo, con el protagonismo de distintos seleccionados europeos, africanos y oceánicos.

En este sentido, Marcelo Faggi, quien fue el entrenador del representativo provincial en aquella instancia, rememoró y dijo: “Estábamos entrenando el equipo con Ricardo Annichini y Hernán Bonarrigo . Empezamos en 2010 y formamos un buen plantel que estaba compuesto por un mix de jugadores de experiencia y algunos jóvenes. Tratamos de darle una impronta de un club al grupo y el equipo de la UER se trataba como si fuera un club más con el sentido de pertenencia, algo que habíamos sentido con el Chani (Annichini) en la época de los ’80”.

“La oportunidad de jugar el Seven en Italia surgió por una iniciativa de Daniel Insaurralde, quien tenía una franquicia para intervenir en el Seven de Roma y nos ofreció la idea de poder presentar un combinado de Entre Ríos”, contó, y agregó: “Con gran esfuerzo de los jugadores y sus familias, contratamos una agencia de viajes y armamos el grupo de acuerdo a los participantes del último Seven de la República y los recientes torneos que habíamos disputados en esa temporada”.

Paso a paso, recordó la experiencia. “Llegamos y fuimos muy bien recibidos por Daniel (Insaurralde) con alojamientos, visitas a clubes y turismo. El certamen se desarrolló con un marco espectacular en el estadio Olímpico de Roma y todos los seleccionados que había, como Rusia, Georgia, combinados de Nueva Zelanda, Francia e Italia”, señaló el Chelo.

“Tal vez, hubo un poco de incomprensión por los dirigentes de aquel momento y los clubes que no contaban con los jugadores para el Torneo Regional, pero igual nos fuimos a Italia. Fueron 15 días extraordinarios, ganamos dos partidos y perdimos tres con combinados nacionales. Los chicos ya demostraron que tenían una impronta diferente y fue un granito para empezar algo que duró muchos años”, continuó.

Y el sacrificio no fue en vano porque los resultados fueron reflejados claramente en el terreno de juego. “Después participamos del Seven de Milán y lo ganamos frente a elencos regionales, que no tuvo el nivel deportivo del Seven de Roma. Después del Seven de la República, es el más importante que compitió Entre Ríos”, destacó Faggi.

“Volvimos de Italia y nos fue muy mal en el Seven de la República. Quedamos muy expuestos porque el ambiente del rugby pensaba que fuimos de joda, pero la exigencia deportiva fue importante y sirvió para consolidar a un grupo que al año siguiente fue subcampeón y durante cinco años consecutivos se metió entre los tres mejores del país. El grupo fue exitoso desde cualquier punto de vista, como el humano, además de sembrar el amor por la camiseta. El desafío es retomar esta senda para nuestro Seven”, concluyó.


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